Y si puedo decir algo ahora… es que es alentador saber que
ya no tendré que preocuparme por el “mañana”.
Voy siento como me acerco paso a paso hacia la muerte,
siento como me acerco mas con cada pastilla que pasa por mi garganta, con cada
trago del amargo alcohol.
Es liberador pensar que todo acabara por fin.
Justo ahora es cuando pienso en todos… en todas y cada una
de las personas que pasaron a través de mi vida, para dejar buenas
experiencias, aprendizajes, valores, bondad…. Pero también pienso en todas esas
personas que solo llegaron a causar tristeza y dolor, como si ese fuera su
único motivo para entrar en mi vida.
Pienso en todos los que me hicieron llorar alguna ves, en
todos los que me hicieron sufrir, en todos los que me provocaron dolor, en todos
los que hicieron que mi vida se volviera gris. Ya que las personas que ame y
creía que me amaban fueron las que más acabaron lastimándome. Fueron las que
infringieron más dolor y no causaron tanto daño por sí mismos, me causaron daño
porque yo se los permití, porque yo los deje entrar en mi vida, porque yo los
deje entrar en mi corazón. Porque yo les di el cuchillo con el que me
apuñalaron por la espalda.
Y si algo puedo decir en este momento, es gracias y adiós.
Gracias por todos los que intentaron ayudarme, aunque fue
demasiado tarde. Gracias por todos los que estuvieron ahí, gracias a todos los
que no hicieron nada. Gracias a los que me hicieron daño y solo buscaban
hacerme infeliz. Gracias… por haber hecho pedazos una vida, por haber hecho
pedazos un corazón. Felicidades… lo han logrado, pero ahora qué sigue? A
ustedes no les importara, a ustedes no les causara ningún daño, solo espero que
esto se quede en su memoria, que se les pudra poco a poco la conciencia al
saber y darse cuenta de que ustedes causaron esto.
Llenaron un corazón de odio.
El suicidio no es un acto de cobardía…. Un verdadero acto de
cobardía lo cometen aquellos que molestan a una persona a tal punto que la
hacen odiar su vida y querer morir.
A ustedes cobardes! Espero que sigan con su vida, espero que
llegue alguien y que les haga daño a tal grado de que odien su vida, de que se
odien a sí mismos. Todos ustedes son detestables.
Adiós, gracias por los que me enseñaron que la belleza
es dolor, que la felicidad es actuación.
Adiós y gracias a todos aquellos que me enseñaron que el
silencio es invocación a la soledad.