Dentro de un corazón latente.

Insomnio, días sin dormir, palabras por decir. Y el sueño se va con cada recuerdo que viene a mi mente, recuerdos de ti, de mí siendo feliz contigo.

Porque es difícil darme cuenta que por primera vez era honestamente feliz… si necesidad de grandes lujos, porque para era suficiente tenerte junto a mí, ese era mi más grande regalo en la vida.

Encerrada en una habitación escucho tu voz rebotando  por las paredes, una y otra vez repitiendo tus promesas de amor… promesas que para mí siguen siendo la vida.

Fue poco el tiempo, fue enorme el sentimiento, al igual que ahora es inmenso el dolor… Y es que lograste derretir un corazón que estaba hecho hielo y lograste ablandarme… a mí que era una piedra. Le diste sentimientos a una insensible.

Antes de tu llegada, parecía no tener sentimiento alguno y el amor era una de las cosas más insignificantes en mi vida, pero después llegaste en un momento de debilidad…. Llegaste en un momento tan preciso que te metiste en mi corazón, tu mirada de aliento, tus palabras de apoyo siendo un extraño me hicieron creer en ti, me hicieron creer en algo, en un sentimiento, en el latido repentino de un corazón.

No necesitaba más en la vida, sabía que contigo era suficiente, porque a cualquier lugar te hubiera seguido, porque del dolor te hubiera protegido. Eras lo único que faltaba en mi corazón… esa pequeña y única llave que podía sacar mis sentimientos más sinceros.

Tal vez en algún momento te olviden mis sentidos. Tal vez mis labios olviden tus besos; tal vez mis ojos olviden la profundidad de los tuyos; tal vez mis manos olviden lo hermoso que era poder acariciarte; tal vez mis oídos olviden el sonido de tu voz.

Pero si de algo estoy segura… es que mi corazón no te olvidara… porque me enseñaste lo que es vida… me enseñaste que vivir implica algo tan hermoso como el amor, pero también implica mucho dolor. Me enseñaste que incluso el corazón mas congelado puede derretirse ante un acto de amor verdadero, me enseñaste que una persona puede morir en vida… y que una persona muerta si puede resucitar. Me enseñaste lo que es el amor en todo su hermoso y doloroso esplendor. Me enseñaste que siempre abra una esperanza, algo por lo cual seguir. Me enseñaste a creer en dios. Me enseñaste a superar las adversidades y que las caídas solo nos hacen más fuertes y precisos. Me enseñaste que vale la pena amar… y esperar toda una vida a la persona que amas.

No fuiste mi amor eterno… pero si serás mi eterno amor.

Te guardare en lo mas profundo de mi corazón… aquel lugar en donde lo que entra ya no sale; guardo tu mirada; el hermoso color de tus ojos; guardo cada palabra de amor; guardo cada palabra que me devolvió la esperanza en la vida; guardo tu sonrisa; guardo tus besos y abrazos; guardo cada momento de felicidad que pase contigo; guardo el momento en que te conocí y el momento en que dijiste adiós; guardo el ultimo día que te vi; guardo tus canciones, guardo aquel momento en que te escuche cantar por primera vez; te guardo a ti; no como un recuerdo… si no como un momento especial en la vida, porque siempre estarás en mi presente, porque ahora formas parte de mi.